Al hacer reservaciones para sus vacaciones de verano, puede considerar rentar una propiedad vacacional. Aunque estas son buenas opciones, conozca las señales de una estafa de alquiler.
Los anuncios falsos de propiedades o con información “robada” son un fraude común de los estafadores. El anuncio de una propiedad que parece muy atractiva por su bajo costo o mejores servicios pudiera resultar falso y que cuando usted llegue al domicilio que le dieron se encuentre con una puerta cerrada con candado, o con una experiencia muy diferente a la que le ofrecieron. Información robada de otro sitio puede suceder cuando se ofrece información de contacto fraudulenta de una propiedad que es muy popular, aprovechándose de la buena fama del sitio legitimo para quitarle a usted su dinero.
Usualmente, los estafadores tienen las mismas características. Le exigen que pague por adelantado con un giro, sin tener manera para devolverle su dinero. Asegúrese de revisar los términos de cualquier servicio de pago que se utiliza para pagarle a una persona desconocida, y pregunte sobre la política de reembolso del comerciante de alquileres o propietario si no están claramente explicadas.
Si usted es dueño de una propiedad vacacional que va a poner en alquiler, conozca las estafas de pago comunes, tal como la estafa de cheque de cajero. Una empresa que parece ser de buena fama le envía un pago por cheque de caja cuya cantidad es de cientos de dólares más de lo que usted pidió. La persona que está haciendo el pago le pide a usted que regrese la cantidad que “equivocadamente” pagó demás. Este pago pudiera parecer seguro ya que se hizo con un cheque, pero quizás usted terminará por descubrir días después a través del banco que el cheque era fraudulento. Para entonces va a ser demasiado tarde.
Más información sobre las estafas de bienes raíces y rentas o visite consumer.ftc.gov.