El Procurador General de Texas Ken Paxton ha liderado una coalición de estados en el envío de una carta a la Comisión Federal Reguladora de Energía (Federal Energy Regulatory Commission, FERC) rechazando su regla propuesta que intenta avanzar la agenda climática radical de la Administración Biden.

Al otorgar una mayor supervisión de la red eléctrica a FERC, la regla propuesta comprometería la capacidad de los estados individuales para determinar por sí mismos la combinación más eficiente de fuentes de energía para sus redes eléctricas. La nueva regla también obliga a los estados a pagar por las costosas líneas de transmisión regional para apoyar la llamada generación de energía "verde", incluso cuando tales gastos contradicen las necesidades del estado y disminuyen la eficiencia y fiabilidad de la red.   

El exceso federal aquí es claro: a FERC nunca se le ha otorgado la autoridad para renovar la estructura de las redes estatales de energía u obligar a los estados y sus contribuyentes a subsidiar las líneas de transmisión a gran escala que no transportan suficiente energía para justificar el costo. Esta invasión de la autoridad estatal excede el alcance limitado de FERC y daña la capacidad de los estados para regular sus redes eléctricas de manera eficiente, todo en nombre del avance de los costosos objetivos climáticos. 

Como dice la carta, la nueva regla está "socializando los costos de una construcción de transmisión masiva para conectar generadores de energía renovable a la red de una manera que distribuya los costos de construcción a una base lo más amplia posible de contribuyentes, sin tener en cuenta si esos pagadores tienen algún interés en la generación de energía renovable. Hay múltiples problemas legales, probatorios y basados en políticas con esta propuesta para remodelar profundamente la regulación de la red eléctrica".

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