El Procurador General de Texas Ken Paxton presentó una acción legal contra la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos que busca detener la aplicación de las regulaciones federales con respecto a los supresores de armas de fuego fabricados en Texas. El Proyecto de Ley HB 957 de la Cámara de Representantes de Texas, aprobado en 2021, exime expresamente de la regulación federal a los supresores de armas de fuego que se fabrican y permanecen en Texas.

La ley federal regula los supresores de armas de fuego, por lo que es ilegal poseer un supresor de armas de fuego para uso personal sin pagar un impuesto. También es un delito federal poseer, fabricar, transportar, reparar o vender un silenciador de armas de fuego a menos que la persona cumpla con las normas federales. 

“Nuestro derecho de la Segunda Enmienda debe ser protegido, y continuaré protegiendo a los texanos de los excesos federales que interfieren con ese derecho inalienable", dijo el Procurador General Paxton. "El gobierno federal no puede simplemente anular la Constitución. No permitiré que empañen la libertad y los valores que los estadounidenses aprecian".

Esta ley federal viola la Segunda Enmienda al cobrar un impuesto y regular los supresores de armas de fuego fabricados y utilizados en Texas. Ningún otro derecho constitucional está sujeto al pago de un impuesto federal antes de que un estadounidense pueda ejercer ese derecho.

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