AUSTIN – El Procurador General de Texas Ken Paxton presentó una declaración ante el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Texas, División de Houston, oponiéndose a un decreto de consentimiento entre las partes de la acción legal O'Donnell v. Condado de Harris, una demanda que fue presentada desafiando el sistema de fianzas del Condado de Harris. Sin la opinión de la Corte Suprema de Texas o de la Legislatura de Texas, el decreto de consentimiento propuesto eliminaría la capacidad de los jueces en el Condado de Harris de tomar decisiones caso por caso con respecto a la fianza adecuada para la mayoría de los acusados criminales, planteando el federalismo serio y preocupaciones de separación de poderes. 

Bajo el decreto de consentimiento propuesto, los magistrados están obligados a liberar inmediatamente a las personas detenidas por delitos menores y por otros delitos que incluyen asalto, robo de un vehículo, portar ilegalmente un arma y crueldad hacia los animales.

"No solo liberar a los criminales sin una consideración individualizada de las circunstancias del delito o su completo historial criminal es contrario a la ley de Texas, sino también que una liberación sin consideración presenta graves peligros para la seguridad pública”, dijo el Procurador Paxton. “Este decreto de consentimiento va en contra de la ley de Texas, el apropiado rol judicial, y la responsabilidad de proteger a las personas en Texas de criminales violentos".

Desafortunadamente, Houston ya ha visto el impacto negativo de esta propuesta de decreto de consentimiento. En septiembre, un hombre llamado Brandon Bell fue arrestado por robo de autos, pero sólo fue acusado de allanamiento de morada a un vehículo de motor, lo que permitió su liberación sin pago de fianza o evaluación individual del crimen o de la historia criminal de Bell. Bell no apareció en su fecha programada en la corte y, sólo tres días después, cometió otro robo de autos a punta de pistola, agredió y robó a un sacerdote, y luego cometió otro robo de autos. Su ola de crímenes terminó cuando se enfrentó a tiros con la policía, situación que terminó en la muerte de Bell y con un oficial veterano baleado tres veces.

Para ver una copia de la declaración presentada en el Tribunal de Distrito, haga clic aquí.